Primer campamento solidario

Primer campamento solidario

Historia

En julio de 2019, inauguramos el primer campamento solidario de Corazón y Manos. Un total de 15 niños, hijos de socios de Corazón y Manos y de mujeres víctimas de violencia de género de Madrid, disfrutaron de una semana llena de actividades, aventuras y acciones multigeneracionales que tienen como objetivo, por un lado, el enriquecimiento en la maduración personal y social de los chicos y por otro, la posibilidad de disfrutar de actividades deportivas al aire libre en entornos naturales.

Primer día

El primer día emprendieron la marcha hacia Cercedilla donde les esperaba una de las actividades deportivas programadas: una jornada multiaventura en el parque Amazonia. A pesar del calor, los chicos disfrutaron al máximo de la jornada.

Segundo día

El segundo día el grupo realizó una experiencia intergeneracional con personas mayores del Centro de Día Almorox Físico. Se desarrollaron muchas actividades que creó una fantástica interacción entre ambas generaciones. Compartieron inquietudes y recuerdos, juegos tradicionales, música, baile y sobre todo, muchas muchas risas.

Un estupendo grupo de chicas y chicos que regaló a los mayores un día inolvidable.

Tercer día

El tercer día los chicos del campamento de verano visitaron un centro de Educación ambiental y desarrollo local que se encuentra en la localidad de El Cuadrón en pleno Valle del Lozoya en la Sierra Norte de Madrid. Allí realizaron distintas actividades que acabaron en una refrescante guerra de globos de agua.

 

Cuarto día

El cuarto día fue el día estrella del campamento de verano. El grupo disfrutó de un increíble día en el embalse del Pontón, en Segovia. Las fotos muestran como pasaron el día y como acabaron.

Quinto día

El último día del Campamento Solidario Corazón y Manos, los chicos pasaron el día en el Huerto de El Retiro y allí volvieron a encontrarse con sus amigos del Centro de Día de Mayores ‘Almorox Físico’. Juntos disfrutaron de actividades, juegos y un interesante taller de olores.

Fueron cinco días magníficos con un grupo de chicos que con su espontaneidad, generosidad y simpatía dejan un recuerdo imborrable entre los mayores con los que han compartido actividades y vivencias.